Edición nº 08

Leyenda sufi: el caballo perdido  |  Reflexiones del Guerrero de la Luz

Reflexiones del Guerrero de la Luz

Las dos tablas
     Un guerrero de la luz divide su mundo con las personas que ama. Procura animarlas a hacer lo que les gustaría, pero no se atreven.
     En estos momentos, el adversario aparece con dos tablas en la mano.
     En una de las tablas está escrito: "Piensa más en ti mismo. Conserva las bendiciones para ti, o acabarás perdiendo todo".
     En la otra tabla se lee "¿quién eres tú para ayudar a los otros? ¿Es que acaso no consigues ver tus propios defectos?"
     Un guerrero sabe que tiene defectos. Pero sabe también que no puede crecer solo, y distanciarse de sus compañeros.
     Entonces, él arroja las dos tablas al suelo, aun creyendo que contienen un fondo de verdad. Ellas se transforman en polvo, y el guerrero continúa ayudando a quien está cerca.

Sobre el camino
     
El sabio Lao Tzu comenta la jornada del guerrero de la luz:
      "El Camino incluye el respeto por todo lo que es pequeño y sutil. Hay que conocer siempre el momento adecuado de tomar las actitudes necesarias".
     "Aunque ya hayas tirado varias veces con el arco, continúa poniendo atención a la manera como que colocas la flecha y como extiendes la cuerda".
     "Cuando el iniciante está consciente de sus necesidades, termina siendo más inteligente que el sabio distraído".
     "Acumular amor significa suerte, acumular odio significa calamidad. Quien no reconoce la puerta de los problemas, termina dejándola abierta, y aparecen las tragedias".
     "El combate nada tiene que ver con la riña".

La verdadera tensión
     
"Cuando tengo el arco estirado" dice Herrigel a su maestro zen "llega un momento en el que, si no disparo inmediatamente, siento que voy a perder el aliento"
     "Mientras intentes provocar el momento de disparar la flecha, no aprenderás el arte de los arqueros" dice el maestro. "La mano que estira el arco debe abrirse como la mano de un niño. Lo que a veces altera la precisión del tiro es la voluntad demasiado activa del arquero".
     Un guerrero de la luz a veces `piensa: "todo aquello que yo no haga, no se hará."
     Y no es exactamente así: él debe actuar, pero ha de dejar también que el Universo actúe en su debido momento.

 
Edición nº08