Edición nº 70
Reflexiones del guerrero de la luz
Los defectos y las cualidades
Un guerrero de la luz conoce sus
defectos. Pero conoce también sus cualidades.
Algunos de sus compañeros se
están quejando siempre: "los demás tienen más
oportunidades que nosotros".
Quizás tengan razón,
pero un guerrero no se deja paralizar por esto, y procura valorar
al máximo sus virtudes.
Sabe que el poder de la gacela reside
en la habilidad de sus piernas. El poder de la gaviota es su puntería
para alcanzar el pez. Aprendió que un tigre no teme a la
hiena porque es consciente de su fuerza.
Un guerrero procura saber con qué
puede contar. Siempre verifica su bagaje, compuesto de tres cosas:
fe, esperanza y amor.
Si las tres están presentes,
él no vacila en seguir adelante.
Confiar sin miedo
El guerrero de la luz confía.
Al igual que los niños confían.
Porque cree en milagros, los milagros
empiezan a acontecer. Porque está seguro de que su pensamiento
puede cambiar su vida, su vida comienza a cambiar. Porque está
seguro de que encontrará el amor, este amor aparece.
De vez en cuando se decepciona. A
veces le hieren.
Y entonces escucha los comentarios:
"¡Qué ingenuo es!"
Pero el guerrero sabe que el precio
pagado vale la pena: por cada derrota, tiene dos conquistas a su
favor.
Todos los que confían lo saben.
En las horas difíciles y en las horas alegres
Un guerrero no comparte su tienda
con quien quiere hacerle daño. Ni tampoco se le ve en compañía
de aquellos que solo desean "consolar".
Evita a los que solo están
a su lado en caso de derrota. Estos falsos amigos quieren probar
que la debilidad compensa.
Siempre traen malas noticias. Siempre
intentan destruir la confianza del guerrero, bajo el manto de la
"solidaridad".
Cuando lo ven herido se deshacen en
lágrimas, pero en el fondo de su corazón están
contentos porque el guerrero ha perdido una batalla, sin entender
que ésto es parte del combate.
Los verdaderos compañeros de
un guerrero están a su lado en todos los momentos, en las
horas difíciles y en las horas felices.
El enemigo oculto
Los amigos del guerrero de la luz
le preguntan de donde proviene su energía. Él les
responde: "del enemigo oculto".
Los amigos le preguntan quién es.
El guerrero responde: "alguien
a quien no podemos herir".
Puede ser un niño que lo derrotó
en una pelea en la infancia, la novia que lo dejó a los once
años, el profesor que lo llamaba burro.
El enemigo oculto pasa a ser un estímulo.
Cuando está cansado, el guerrero recuerda que él aún
no ha presenciado su coraje.
No piensa en venganza, porque el enemigo
oculto ya no forma parte de su historia. Piensa solamente en mejorar
su habilidad para que sus victorias recorran el mundo y lleguen
a oídos de quien lo hirió en el pasado.
El dolor de ayer se transformó
en la fuerza de hoy.
Del breviario de la caballería medieval
Así dice el breviario de la caballería medieval:
"La energía espiritual
del Camino utiliza la justicia y la paciencia para preparar tu espíritu.
Éste es el Camino del Caballero.
Un camino fácil y al mismo tiempo difícil, porque
obliga a dejar de lado las cosas inútiles y las amistades
relativas. Por eso, al comienzo, se duda tanto en seguirlo.
He aquí la primera enseñanza
de la Caballería: borrarás lo que hasta ahora tenías
escrito en el cuaderno de tu vida: inquietud, inseguridad, mentira.
Y escribirás en lugar de todo esto la palabra coraje. Comenzando
la jornada con esta palabra, y manteniendo la fe en Dios, llegarás
a donde tienes que llegar".
El arte de despertar
El guerrero de la luz está
ahora despertando de su sueño.
Él piensa: "no sé
lidiar con esta luz, que me hace crecer".
La luz, sin embargo, no desaparece.
El guerrero piensa: "se necesitarán
cambios que no tengo ganas de hacer"
La luz continúa allí:
porque la voluntad es una palabra llena de ardides..
Entonces los ojos y el corazón
del guerrero comienzan a habituarse a la luz.
Ella ya no le asusta; y pasa a aceptar
su Leyenda, aunque esto signifique correr riesgos.
El guerrero estuvo dormido mucho tiempo.
Es natural que vaya despertando lentamente.